Mi hija Rocío tenía solo dos meses cuando ví por primera vez rastros de sangre en su pañal.
Hoy, con un año y un mes de vida, Rocío es una niña saludable pero que batalla constantemente las alergias alimentarias con las que ha sido diagnosticada.
Ésta es la historia de Rocío y el relato de nuestras experiencias y esfuerzos enfocados en verla crecer feliz, sonriente y saludable. Si están en la misma película, ojalá que aquí puedan encontrar solidaridad, coraje, consuelo, información y ánimo.
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2 comentarios:
Hola! llegué a vuestro blog buscando respuesta para lo que le sucede a mi chiquita. Igual historia solo que ella tiene recien 6 meses. Está muy bien. Estoy en plena etapa de averiguacion y aunque le doy el pecho y estoy a dieta de lacteos, mi beba sigue haciendo con sangre...mi pregunta es...como llegaron a la conclusion de que era alergica a las proteinas de la leche?
María Eugenia,
Siento mucho la súper tarde respuesta. Nosotros el primer diagnóstico nos lo dió la eliminación. Me quité todo lácteo, porque mi hija también estaba sólo con leche mía y pararon los síntomas.
Luego, introduje los los lácteos nuevamente y los síntomas volvieron después de unos meses, pero los síntomas estaban mucho más severos. Entonces empezó mi ida y venida a doctores y doctores que no me creían y nunca habían escuchado de alergias a la proteína de leche. Pasé por una docena de médicos hasta que encontré una gastroénteróloga chilena que me dijo muy seria: eso se llama alergia a la proteína de leche y severa. Terminamos haciendo endoscopías y colonoscopías, exámenes de parches para ver si las alergias se habían potenciado a otros alimentos. En ese tiempo nos tocó hacer un tratamiento más estricto porque efectivamente su inicial alergia a la proteína de leche se conviertió en alergia a leche, soya, huevo, trigo, avena.
Pero lo superamos. Iniciamos una dieta con formulas hipoalergénicas y ninguno de los sólidos que menciono.
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